Publicación de Red de Casas en el Diario El País
04 ene 2017
Autora: Maribel Rodríguez
Viktor Frankl (1905-1997), fue el psiquiatra vienés que creó la Logoterapia, una psicoterapia para encontrar sentido a nuestras vidas. Además, Viktor Frankl es mundialmente conocido por su libro autobiográfico “El hombre en busca de sentido”, en el que relata cómo pudo enfrentarse al sufrimiento que supuso estar más de tres años en campos de concentración nazis. Durante estos años, pone en práctica sus propuestas psicoterapéuticas sobre sí mismo, para mantener su integridad humana ante el horror que le toca vivir. En su relato, nos muestra su gran capacidad de superación y de crecimiento a pesar del dolor, a través de su esfuerzo por cultivar una libertad interior cuyo fundamento considera espiritual. Para él, “el hombre puede conservar un vestigio de la libertad espiritual, de independencia mental, incluso en las terribles circunstancias de tensión psíquica y física”. Su vivencia nos muestra la posibilidad de mantener una luz viva en nuestro interior, por muy oscuras que sean las circunstancias que nos tocan vivir.
Más allá de la gran inteligencia de Frankl y de su legado científico, encontramos en él a un gran ser humano, inquieto por la búsqueda de la verdad y del amor por sus semejantes. Siendo muy joven, con 16 años, inicia su correspondencia con Sigmund Freud, con quién se encuentra personalmente a los 19 años. Aunque se siente inspirado por algunas de las propuestas de Freud, se termina apartando de él, al no estar de acuerdo con algunos de sus planteamientos, que considera reduccionistas. Posteriormente entra en el círculo de colaboradores de Alfred Adler, pero también se acaba retirando, porque para él es también limitada la idea de que el deseo de poder sea lo que más mueve a los seres humanos.
Muy joven inicia actividades solidarias, ya que con 20 años organiza centros de consulta para jóvenes afectados por la Primera Guerra Mundial.
De su actividad científica y propuesta psicoterapéutica, cabe resaltar la publicación de un artículo suyo en 1938, escrito con 33 años, en una prestigiosa revista alemana, en el que expone los conceptos de su Logoterapia y análisis existencial.
En septiembre de 1942 es deportado a los campos de concentración nazis, donde mueren su esposa (con la que llevaba menos de un año casado), sus padres y su hermano Walter. En abril de 1945 las tropas aliadas liberan el campo de concentración de Dachau, en el que está internado. En Navidad de ese mismo año, dicta entre lágrimas, durante 9 días su libro más conocido: “El hombre en busca de sentido”, cuyo título original es “Un psicólogo en un campo de concentración”.
En 1955 es nombrado profesor principal de la Universidad de Viena y desde entonces es invitado por más de 200 universidades de todo el mundo a dar clases y conferencias y acaba siendo miembro de 75 asociaciones científicas. En el año 1961 es nombrado profesor en la Universidad de Harvard y a partir de 1970 29 universidades de todo el mundo le conceden el título de Doctor Honoris Causa.
Frankl fallece el 2 de septiembre de 1997, a los 92 años de edad.
La Logoterapia es una psicoterapia enfocada a la búsqueda del sentido de la vida, y está especialmente indicada en casos de falta de sentido vital o vacío existencial, en las crisis existenciales y en situaciones de duelo o de gran sufrimiento. Además, es una psicoterapia que busca una visión antropológica integral del ser humano, en la que se tengan en cuenta todas las dimensiones que le constituyen: cuerpo, mente y espíritu. La Logoterapia considera a cada persona como un ser único e irrepetible, que tiene derecho a encontrar un auténtico sentido a su vida, llegando a ser quién realmente es. Para Frankl La búsqueda por parte del hombre del sentido de la vida constituye una fuerza primaria y no una «racionalización secundaria» de sus impulsos instintivos. En la Logoterapia se pretende hacer a la persona consciente de lo que anhela en lo más profundo de su ser. El logoterapeuta tiene la función de ayudar al paciente a ampliar su campo de visión, para que sea más consciente de quién es en realidad, haciendo una indagación en lo más profundo y auténtico de sí, para llegar a saber qué puede hacer para que su vida sea más plena.
Actualmente en España hay varias asociaciones que transmiten las enseñanzas y el legado de Viktor Frankl, como la Asociación Española de Logoterapia y la Asociación Viktor Frankl de Valencia. Sin embargo en nuestro país, son pocos los profesionales de la salud mental con formación específica en este enfoque , que presenta mucha más difusión y actividad en otras partes del mundo, y se está haciendo un gran énfasis en la necesidad de encontrar sentido a la vida para tener una vida más plena.
En el año 2017 será el 20 aniversario de la muerte de Frankl.
Maribel Rodríguez es Doctora en Medicina, Psiquiatra y Máster en Psicoterapia y Logoterapeuta, Profesora en la Universidad Pontificia Comillas de Madrid, Directora del Centro Engramas de Psicoterapias Integradoras y Directora de la Cátedra Edith Stein de la Universidad de la Mística de Ávila. Asimismo es miembro de la Asociación Española de Logoterapia.
Este artículo se enmarca en la conferencia que dictará la profesora Maribel Rodríguez el 16 de enero de 2017 en Centro Sefarad-Israel.
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