RESILIENCIA
ESTUDIO INTEGRAL
-Estudio y síntesis: paráfrasis
-Federico Ríos – Octubre, 2024
Dedicado con gran afecto a mi hermana Cecilia, ejemplo de resiliencia, por su espíritu y actitud ante la vida. A pesar de todos los problemas y dificultades que tuvo que pasar. Por su fe, convicciones, esperanza y fundamentalmente sus ganas de vivir la vida a pesar de todo.
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RESILIENCIA Y LOGOTERAPIA
Gerónimo Acevedo – 2002
La resiliencia consiste en la capacidad de mantenerse integrado a pesar de la adversidad.
Forma de nombrar la potencia de lo espiritual en la conducta humana personal o grupal, que se dan en conductas sanas, frente a situaciones adversas y resultados inesperados. Vulnerabilidad en lo psicofísico, y también los auxilios de la resiliencia comunitaria.
INTRODUCCIÓN
Resiliencia humana es la capacidad de una persona o de un sistema social de vivir bien y desarrollarse, a pesar de las difíciles condiciones de vida, y de salir fortalecidos y ser renovado por ellas.
Se ha pasado a un modelo de prevención y promoción de las potencialidades y los recursos que el ser humano tiene en sí mismo y a su alcance.
Interpretar la enfermedad como un proceso ocasionado por un agente causal externo en un terreno vulnerable, produce una exclusión antropológica con las consecuencias nefastas de deshumanización.
La enfermedad no es solamente un problema bioquímico, una alteración de la biología, sino una experiencia que conmueve al ser humano en su totalidad.
Conocer es saber qué hacer con la información, relacionar y articular, no solo analizar y distinguir. Es organizar buscando el sentido. Una cosa es tener datos y otra muy diferente es conocer.
El paciente no es simplemente un cuerpo y ni un simple ser viviente. Es una persona, un ser con inteligencia y concepto de sí mismo y del mundo, con un proyecto de vida.
El enfermar del hombre, no es la avería de una máquina. De ahí la necesidad de ocuparse de las distintas dimensiones del enfermar humano. Es una experiencia existencial que conmueve al ser humano en su totalidad, es un problema humano.
La antropología frankleana propone la resiliencia desde una visión del hombre que reconoce las dimensiones bio-psico-espirituales.
Factores de resiliencia:
Familiares: vivencias afectivas y valores vividos en su espacio familiar.
Personales: La introspección, cuando se interroga a sí mismo sobre el sentido de la vida; el humor, como autodistanciamiento, que permite salirse de uno y mirarse a sí mismo «desde afuera «, detectando los problemas y dificultades a resolver.
Acciones resilientes:
Cuando se da las respuestas a los interrogantes dramáticos que la vida.
Resultados resilientes:
La resiliencia tiene la virtud de ser una interdisciplinariedad entre el ámbito social, filosófico y psicológico. La logoterapia como instrumento interdisciplinario la convierte en una realidad.
La resiliencia y el enfermar como gerundio:
El gerundio es una forma verbal invariable que expresa la acción como ejecutándose en el presente, por ejemplo, de comer es comiendo, de vivir es viviendo, de caminar, caminando…
La acción está abierta, desarrollándose, moviéndose, está más cercana de quien la ejerce. Le otorga más vida a la acción, opera en la psiquis de una forma similar.
Esta forma verbal es la clave para poder crecer y entender los fenómenos más importantes de la vida.
El enfermar: y resiliencia
La pregunta de ¿por qué se enferma? debe integrarse con la de ¿por qué no se enferma? Integrando estas dos preguntas la enfermedad pierde su rol protagónico exclusivo, y propone al ser humano que dé una respuesta. Se humaniza el concepto de sentido de la enfermedad.
En él intervienen factores de afuera, como también la respuesta de adentro, lo que muestra su multidimensionalidad.
Se podría decir que los de «afuera» son los factores condicionantes y lo de «adentro», la persona, la libertad del ser no sujeta totalmente a los condicionantes.
Es importante identificar la vulnerabilidad en lo psicofísico y la resiliencia en lo espiritual.
Reflexiones sobre las complejidades humanas:
- No hay hombre sin mundo ni mundo sin hombre.
- El ser humano es vulnerable y posee resiliencia.
- La vulnerabilidad es la impotencia, la resiliencia es lo potencial.
- La vulnerabilidad está en lo fáctico, la resiliencia en lo existencial.
- La vulnerabilidad está en lo psico-físico, la resiliencia en lo espiritual.
- La familia es vulnerable y posee resiliencia.
- La comunidad es vulnerable y posee resiliencia.
- La vulnerabilidad y la resiliencia son dos caras de la misma moneda. La primera es el signo del antiguo paradigma: ¿por qué enferma el hombre? La segunda es la clave del nuevo paradigma: ¿por qué puede mantenerse sano?
- Surge la redefinición del concepto de salud que apunta a la totalidad del hombre (bio-psico-espiritual).
Salud, no como ausencia de enfermedad sino como:
– Sentido de vida
– De escribir la propia historia vital.
– La posibilidad de escuchar.
– La de ser querido y de querer, el encuentro con el otro.
– De comprometerse, de participar.
– De establecer vínculos afectivos, de convivir.
La salud es la capacidad de poder enfermar y defenderse. La enfermedad, por el contrario, es poder superar las dificultades.
Resiliencia personal:
Tener la capacidad de afrontar el sufrimiento, reconstruirse y no perder la capacidad de amar, de luchar, de resistir.
La resiliencia es más que resistir, es aprender a vivir. Hay gente que ha padecido una situación extrema y eso lo lleva a saborear cada momento bueno que se le presenta.
La resiliencia no sucede sólo en el interior de la persona, tampoco sólo en su entorno.
El futuro no se gesta solo en la historia de vida, está en el presente, en lo que todavía puedo hacer, es un crédito abierto que tengo que utilizar.
Obligación y deber:
No es que haya personas más fuertes que otras, sino personas que han podido dar este diálogo con el otro. Nuestra mirada sobre la desgracia cambia, si a pesar del sufrimiento buscamos la maravilla.
El enfoque de resiliencia puede ser el cultivo de una esperanza realista, porque sin negar los problemas, centra la atención en las fuerzas y el potencial humano.
La esperanza real no es una vía de escape, sino que descubre un potencial valioso existente, pero escondido a una mirada superficial y pesimista del valor humano. Enfrentar, aceptar responder.
Hay factores y acciones resilientes, pero la resiliencia sólo se hace presente en la acción de la vida y sus circunstancias.
Fuentes interactivas de la resiliencia:
Para este tema, se presenta el siguiente esquema (basado en Grotberg, (1997):
Yo soy una persona:
-por la que los otros sienten aprecio y cariño.
-feliz cuando hago algo bueno para los demás respetuosa de mí mismo y del prójimo.
Yo estoy: responsabilizarme de mis actos, esperanzado.
Yo tengo personas:
-en quienes confío y me quieren.
-me ponen límites para evitar los problemas.
-con su conducta me muestran el correcto proceder que me ayudan cuando estoy enfermo.
PUEDO
-hablar sobre cosas que me inquietan
-buscar la manera de resolver mis problemas
-controlarme cuando hago algo peligroso que no está bien
-buscar el momento apropiado para hablar con alguien o actuar
-encontrar a alguien que me ayude cuando lo necesito
Respecto a la responsividad, dice Piulachs (1976) «Para juzgar la situación de salud o de enfermedad, no puede recurrirse a una norma, según un concepto ideal o un criterio estadístico». Como lo plantea Grothe, «es necesario emitir el juicio partiendo de una norma personal e individual, según el individuo concreto».
Acciones resilientes:
- Búsqueda de sentido. «El sentido no es la causa de la salud sino el motivo para tenerla. Quienes entienden que la salud se preserva o se consigue a través de la lucha contra la enfermedad, más que ser sanos quieren no estar enfermos, y al buscar esa utopía corren el riesgo de perder la vida en su afán de evitar las enfermedades y la muerte.»
Buscar un sentido, saber que hay algo valioso en la vida, es dar coherencia y orientación a ésta.
- Humor. Quien logra reírse de sí mismo ganará en libertad interior y fuerza. Con el humor se dinamiza el potencial humano.
- Introspección. Preguntarse a sí mismo y dar una respuesta honesta.
- Autodistanciamiento. No soy lo que me sucede.
- Independencia. Juzgar una situación prescindiendo de sus deseos.
- Capacidad de relacionarse. La diferencia como generadora de claridad.
- Afectividad. Puede acrecentar su esperanza y enriquecer su autoestima.
- Autoestima. Cada ser humano es único e irrepetible en su diferencia, clave de la aceptación personal y social. Cada persona brilla con luz propia. No hay dos fuegos iguales.
- Calidad de vínculos. Es el apoyo que un ser humano requiere para sentirse parte del mundo, de la sociedad, del país, de la familia. Lo individual es una ilusión.
- Capacidad valorativa. Imprescindible para acciones resilientes.
- Iniciativa. Ser proactivo.
- Creatividad. Capacidad de crear condiciones satisfactorias.
- Independencia. No es el niño que se queda «quietito» como pensaban nuestros maestros.
Resistencia y comunitaria:
La comunidad humana no es algo opcional, sino que es algo exigido interiormente. Esta dimensión humana es el reconocimiento del «otro». Significa intercomunicación afectiva, que es la raíz de todo crecimiento humano.
Crear lazos es la base de la confianza y también es asistir en el dolor, acercarse en la angustia para dar auxilio.
Es un nuevo instrumento para obtener equidad social y un nuevo mecanismo para combatir la pobreza.
La resiliencia comunitaria requiere de:
El análisis social.
El análisis coyuntural
Factores que favorecen la resiliencia comunitaria:
Autoestima
Sentido de comunidad
Identidad cultural
Vincularidad
Equidad social
Liderazgo
Honestidad
Resiliencia y logoterapia
La logoterapia ve al ser humano en la indigencia espiritual, favorece la búsqueda de sentido en su vida y vivir de acuerdo a su escala de valores.
Todo ser humano tiene la posibilidad de vivir valores de creación (dar), de experiencia (recibir) y de actitud (ante una circunstancia).
«Sabemos que, si existe realmente algo que permite a los hombres mantenerse en pie en las peores circunstancias y condiciones interiores, es precisamente el saber adonde va, el sentimiento de tener una misión». Frankl (1983)
La logoterapia y la resiliencia tienen en común la transformación de los comportamientos negativos en nuevas posibilidades. La resiliencia requiere un marco ético que la logoterapia promueve y favorece, al acompañar a la persona a descubrir los valores existentes.
Conclusión
Resiliencia es lo personal, la creatividad, la potencia de lo espiritual en la conducta humana personal o grupal, y dan como resultado conductas sanas frente a situaciones adversas.
El hombre, como ser-en-el-mundo, jamás aparecerá acabado, realizado,
El poder para elegir la respuesta.
El concepto de resiliencia nace con la aparición de resultados inesperados y conserva el factor misterio como un factor esencial en su definición.
Hay cuatro caminos para no resignarse a la incertidumbre:
- La acción.
- Estrategia. Se modifican las acciones en función de las informaciones recibidas.
- Apuesta. Integrar la incertidumbre en la fe o la esperanza.
- Confianza.
La resiliencia nos ayuda a distanciarnos. (Vanistendael, 1998):
-del desánimo, en cuanto realismo sin esperanza
-del cinismo, incapaz de ver lo positivo de la realidad
-de ilusiones poco realistas
Ejemplo de Resiliencia.
A mi hermana Cecilia en 1990 le diagnostican Síndrome de Sjögren Sistémico, que afecta todas las glándulas de secreción externas, llamado también Síndrome de las mucosas secas. Trastorno del sistema inmunológico caracterizado por la sequedad de los ojos y la boca. En esta enfermedad, el sistema inmunológico del cuerpo ataca a sus propias células saludables que producen saliva y lágrimas. El tratamiento incluye colirios, medicamentos y cirugía ocular.
Tuvo intervenciones médicas y diez operaciones hasta el año 2000, en que queda ciega.
Comencé a leerle a mi hermana las obras de Frankl y todo artículo sobre Logoterapia que encontraba. Entramos así a recorrer juntos este nuevo camino, el de tratar de entender a la Logoterapia y la Búsqueda del Sentido de la Vida. Vislumbraba que por allí podía estar la salida, tanto la de ella, como la mía y creo que puede ser la de muchos, no digo todos porque sería mucho
Así fuimos avanzando, escuchando, dialogando y aprendiendo. Empezamos a entender la logoterapia y a tratar de poner en práctica sus enseñanzas.
Hasta el año 2008 que surgió la posibilidad de hacer el Curso de Postgrado, de la Univ. Católica de Salta: Antropología de la Misión Profesional. Sobre la Logoterapia.
Todo esto le ayudó a ir sobrellevando su delicada situación de salud, física y psicológica.
Hizo terapia, yoga y otros tratamientos, siempre con voluntad, decisión y un con un espíritu, fe y esperanza inquebrantable.
En el año 2010 le realizan un implante de una prótesis Boston I en un solo ojo, y vuelve a ver. Después de un año no funcionó esa intervención, se explantó y queda definitivamente ciega.
Hoy después de más de 30 años vive una vida normal, gracias a su temple espiritual y psicológico, su fe y esperanza, adquiridos en una larga y traumática experiencia de vida, por supuesto con la ayuda de toda su familia y amigos que la contienen afectivamente. También los médicos y profesionales que la atienden.
Se maneja sola, en algunas cosas en su casa y sale a todas partes con una compañía, hace vida social y comunitaria que la estimula y la ayuda.
La logoterapia le enseñó a darle sentido a la vida. Sus fuertes convicciones espirituales y religiosas, la fortaleza para seguir siempre adelante, a pesar de todo si a la vida
Un ejemplo total y real de resiliencia.
Bibliografía
-Acevedo, Gerónimo.
El modo humano de enfermar
Fundación Argentina de Logoterapia
Buenos Aires – 1996
– Combariza, H.
Resiliencia.
El oculto potencial del ser humano.
Bogotá – Colombia – 2001
– Díaz, C. – 2001
-La intencionalidad: tu-y-yo. Nous.
Boletín de logoterapia y análisis existencial
– Frankl, V.E.
La psicoterapia al alcance de todos.
Barcelona: Herder – 1983
– Frankl, V.E. – 1993
El hombre en busca de sentido.
Barcelona: Herder. (Original de 1946).
– Frankl, V.E.
A pesar de todo,
decir sí a la vida
Plataforma Editorial – 2016
– Grotberg, E.
-Resiliencia.
Descubriendo las propias fortalezas.
Buenos Aires: Paidós – 1997
– Piulachs, P.
La enfermedad y el enfermo.
Barcelona: Toray – 1976
– Vanistendael, S. (1998).
Resiliencia.
Capitalizar las fuerzas del individuo
Bs As: Oficina del libro CEA- 1998
